martes, 8 de abril de 2008

Resistente como un roble


Es a veces cuestión de aptitud, a los 96 años mantener su independencia es una verdadera bendición.

Así como el roble es más resistente con los años y se enfrenta al desgaste, el ser humano puede mantenerse fuerte si mantiene una disposición positiva ante el trajinar de la vida.

Bernarda Angulo, es un ejemplo. Canaria de 96 años, alcanzó el record mundial de 400 libres de la categoría de 95 a 99 años con un crono de 19.20.68 en el XIII campeonato de España Open Masters de invierno que se celebró en Palma de Mallorca.

"Es posible que ahora pueda nadar menos, pero tengo las mismas ganas”, manifestó Bernarda.

Aprendió a nadar ya entrada en años, hace medio siglo, cuando soplaba ya 46 velas, y desde hace quince no se ha perdido ni una sola competición de las tres que hay cada año.

Más saludable que sus hijas
Hasta sus descendientes, de 71 y 76 años, se preguntan cómo hace su madre para estar tan ágil.
Como pez en el agua
Hasta hace 10 años, compaginaba la natación con el senderismo, pero una lesión le obligó a centrarse en el agua. "Hacía rutas de 25 kilómetros, pero ahora el nadar lo hago mejor que el caminar. Sólo me fío de mis piernas cuando estoy en el agua".

Cronología
- 1912: El día 21 de marzo nace en Las Palmas.- 1931: Se casa con 19 años con un hombre 11 años mayor que ella.- 1957: Aprende a nadar.- 1976: Fallece su marido y, a los dos años, muere uno de sus hijos en un accidente de tráfico.- 1992: Con 80 años empieza a competir en pruebas de natación máster. Desde entonces no se ha perdido ninguna.- 2007: Bate en Madrid la plusmarca mundial de los 400 libres de la categoría de 95 a 99 años con un crono de 19.20.68.

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